Hasta este momento, nos hemos centrado sobre todo en la forma de dirigir una empresa como autónomo cuando hablábamos del tema del negocio propio. Aparte de esta forma de ser empresario, también existen en Polonia otras soluciones legales que permiten desarrollar la actividad empresarial bajo distintos tipos de sociedades.
¿Qué sociedades existen en Polonia?
En este artículo no vamos a enumerar todos los tipos de sociedades que existen en el régimen legal polaco, pero sí todas las que están relacionadas con el tema de gestionar una empresa.
Basándose en el Código Civil se puede crear y dirigir una Sociedad Civil (Spółka Cywilna). Además de esto basándose en el Código de Comercio (Kodeks Spółek Handlowych) se pueden crear sociedades personalistas y sociedades capitalistas. En las sociedades personalistas incluimos: Sociedad Colectiva (Spółka Jawna), Sociedad Corporativa (Spółka Partnerska), Sociedad en Comandita (Spółka Komandytowa), Sociedad en Comandita-Anónima y también la mencionada anteriormente Sociedad Civil. Entre las sociedades capitalistas podemos enumerar las Sociedades Anónimas (Spółka Akcyjna) y las Sociedades de Responsabilidad Limitada (Spółka z Ograniczoną Odopowiedzialnością).
¿Cuándo fundar una sociedad? ¿Cuándo ser autónomo?
Ser autónomo (jednoosobowa działalność gospodarcza) es en realidad la manera más rápida y simple de iniciar un negocio en Polonia. Además no genera casi ningún coste en el momento de abrir una empresa. Es accesible para los ciudadanos polacos y gran parte de los extranjeros. Este tipo de actividad empresarial es también ventajoso gracias a sus reducidos costes de contabilidad. Ser autónomo también tiene algunas desventajas, entre otras, el empresario responde con todos sus bienes por las deudas de la empresa y además con los bienes de su cónyuge si no hay división de bienes entre ellos.
En el caso de las sociedades, su creación y los gastos de este proceso son mucho más complejos y dependen del tipo de sociedad que hayamos elegido para nuestro proyecto empresarial. Pero hay situaciones en las que nos vemos obligados a crear una sociedad por circunstancias legales o por nuestra propia situación. Por ejemplo, en el caso de que queramos dirigir la empresa junto a otra persona, podríamos fundar una Sociedad Civil. Por otra parte, las sociedades capitalistas pueden ser una solución para alguien que quiere evitar la posible responsabilidad por las deudas de la empresa y así no responder con sus propios bienes, gracias a la división entre los bienes de la sociedad y los bienes privados. Las sociedades capitalistas (la Sociedad de Responsabilidad Limitada y la Sociedad Anónima) son también una posible solución para los extranjeros que no pueden abrir un negocio en Polonia con ninguna otra forma legal.